Cableado de datos basado en cobre Transmisión de datos fiable con tecnología probada

Para la transmisión, un parámetro importante es la atenuación de la señal mediante el medio de transmisión. Como esta atenuación depende de la frecuencia de transmisión, se especifica en diferentes frecuencias; las frecuencias típicas son, por  ejemplo, para WLAN 2,4 GHz o 5,8 GHz. Los cables con una impedancia de 50 Ω o 75 Ω se utilizan muy habitualmente. Solo se deben utilizar conjuntamente cables y otros componentes con la misma impedancia. La mezcla puede dar lugar a desajustes. Estos provocan reflejos no deseados.

Un caso de aplicación típico de los cables coaxiales es la conexión de transmisores o receptores con una antena, por  ejemplo, en redes LTE, WLAN, 5G y de campus.

Debajo del revestimiento del cable, los cables de datos basados en cobre suelen tener una pantalla eléctrica que protege frente a las influencias externas. Habitualmente se utilizan dos conceptos de pantalla diferentes: la pantalla trenzada, una malla cerrada de filamentos metálicos (Screened = S) y la lámina de pantalla, una lámina hecha de metal o plástico recubierto de metal (Foiled = F). La pantalla total del cable se indica, por tanto, con S, F o SF.

No solo el cable completo, sino también los pares de hilos individuales se pueden apantallar con su propio apantallamiento con una lámina de pantalla con respecto al resto de pares de hilos (Foiled Twisted Pair = FTP).

En los cables de par trenzado, se trenzan entre sí dos hilos y los pares de hilos también se trenzan unos con otros.

Los hilos individuales de un cable de datos basado en cobre están formados por un aislamiento de plástico y el núcleo de cobre. Esto difiere en función del uso previsto. En los cables de instalación se trata de un núcleo de cobre macizo. En el caso de los cables flexibles, este núcleo está formado por 7 cables o, en el caso de los cables altamente flexibles, por 19 hilos trenzados. La sección de cada uno de los conductores individuales se indica con la unidad de medida American Wire Gauge (AWG). Son muy habituales AWG 22 para los cables de cuatro polos y AWG 26 para los de ocho polos.

Los cables de cobre también se utilizan en combinación con los conectores placa a placa. Estos conectores ofrecen soluciones apantalladas y sin apantallar para la transmisión de datos y señales en el equipo en un espacio estrecho. Pueden llevarse a cabo alineaciones de placas de circuito impreso de forma personalizada con diferentes diseños orientados a la aplicación, alturas de apilamiento y números de polos.

En el armario de control, los componentes de cobre ofrecen soluciones de cableado para aplicaciones Ethernet y PROFINET – adaptadas a su sistema de transmisión de datos.

Soluciones de conexión fiables y una transmisión de datos universal hasta 10 GBit/s (CAT6A): los patch cables RJ45, USB y HDMI, así como los conectores RJ45 confeccionables sin herramientas especiales son óptimos para los requisitos especiales del cableado industrial. Los conceptos especiales de pantalla y los componentes de cobre resistentes a la torsión son esenciales para el funcionamiento fiable de los robots y los sistemas de transporte.

En los edificios inteligentes tienen que interconectarse distintas aplicaciones de forma descentralizada. Un edificio inteligente solo se puede hacer realidad con conexiones de equipos estandarizadas, de forma que los sistemas individuales del edificio y sus aplicaciones se comuniquen con fluidez entre sí. Los conectores y los patch cables son la base para ello.

Durante la transmisión de datos en zonas exteriores, por ejemplo, la telecomunicación o las energías renovables, se exigen requisitos elevados a los componentes utilizados. Conectores especiales para el uso en exteriores frente a condiciones ambientales exigentes como amplias variaciones de temperatura, humedad, rayos UV y vibraciones.